Colombia lidera la puesta en marcha del Fondo de Pérdidas y Daños en la COP28
La puesta en marcha del Fondo, adoptada en la COP28, es un hito en las negociaciones climáticas y un compromiso del país con la acción climática global.
De izquierda a derecha: Paula San Miguel y Ángela Rivera, negociadoras de equipo de Colombia en la COP28. Foto, cortesía Minambiente.
Este significativo logro surge después de que el Comité de Transición, establecido durante la COP27 en Egipto y compuesto por 24 países, incluyendo a Colombia en representación de América Latina y el Caribe, acordara la estructuración y financiamiento del fondo.
Acceso a Recursos para los Países en Desarrollo:
Tras tres décadas de negociaciones infructuosas, los países en desarrollo, gracias a esta iniciativa liderada por Colombia, tendrán acceso a recursos cruciales para hacer frente a los impactos devastadores de la crisis climática en territorios altamente vulnerables.
Operación por el Banco Mundial:
El fondo será administrado por el Banco Mundial, bajo condiciones definidas por los países en desarrollo. Aunque desde el inicio se abogó por un fondo independiente, el acuerdo provisional invita al Banco Mundial a gestionarlo durante un periodo interino de 4 años.
Ministra de ambiente, Susana Muhamad. Foto, cortesía Minambiente
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, enfatiza la importancia de este logro: “Cumplimos con todos nuestros objetivos para poner en marcha este fondo de pérdidas y daños, que representa una oportunidad para que todos los países en desarrollo, incluyendo Latinoamérica, accedan a recursos. Esperamos que los países desarrollados lideren la movilización de recursos, reconociendo su responsabilidad histórica y garantizando el reaprovisionamiento del Fondo. Celebramos esta rápida puesta en marcha, estratégica para la acción climática mundial”.
Fuentes de Financiación Diversificadas:
El Fondo podrá recibir aportes financieros de diversas fuentes, como donativos, préstamos de fuentes públicas y privadas, y otras modalidades innovadoras. Además, se contempla una inyección de capital cada cuatro años, junto con una estrategia a largo plazo para la recaudación de fondos y movilización de recursos financieros nuevos, adicionales, previsibles y suficientes de todas las fuentes.
El equipo negociador de Colombia celebra esta decisión, uniéndose al proceso de operación del Fondo y recordando que esta respuesta internacional basada en la justicia ambiental es el resultado de tres décadas de lucha.
La puesta en marcha del Fondo, adoptada de manera unánime en las primeras horas de la COP28, representa un hito histórico en las negociaciones climáticas y refleja el compromiso de Colombia con la acción climática global.
El Fondo de Pérdidas y Daños inicia su operación con aportes financieros de 5 naciones de la siguiente forma:
• Emiratos Árabes Unidos, como primer aportante, con una cifra de USD$100 millones
• Alemania, USD$ 100 millones
• Reino Unido, £40 millones
• Estados Unidos, USD$ 17.5 millones
• Japón, USD$ 10 millones.
En total, los países en desarrollo que necesitan atender a sus poblaciones afectadas por los efectos del cambio climático, cuentan con una cifra inicial cercana a los USD$275 millones en el Fondo.
EL PAPEL DE COLOMBIA EN LA COP28
Imagen de una de las actividades de inauguración de la COP28. Sheikh Abdullah bin Zayed, ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional, (centro), con el Dr. Sultán Al Jaber, ministro de Industria y Tecnología Avanzada y recién nombrado presidente de Cop28, (segundo por la derecha), y otros altos funcionarios en el acto. Foto: Víctor Besa / The National
Colombia, representada por el presidente Gustavo Petro y la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, se presenta en la COP28 en Dubai con una posición climática audaz y seis propuestas trascendentales para desafiar la inacción global.
Las Seis Propuestas Transformadoras de Colombia en la COP28
Replantear Modelos Económicos Mundiales:
Colombia aboga por un replanteamiento integral de los modelos económicos mundiales. La Transición Energética, junto con la eliminación progresiva de combustibles fósiles, es esencial para enfrentar la crisis climática sin generar una crisis económica.
Portafolio de Inversión Sostenible
Colombia presenta un portafolio con cinco líneas de inversión estratégica que fusiona crecimiento económico con conservación y protección de ecosistemas estratégicos.
Tratado de No Proliferación de Combustibles Fósiles:
Liderando un tratado global, Colombia aboga por una Transición Energética justa y la eliminación progresiva de los combustibles fósiles, poniendo un alto a la frontera extractivista.
‘Plan Marshall’ para Países Vulnerables:
Propuesta para reconocer la biodiversidad y los aportes a la reducción de emisiones como pago a la deuda externa de los países vulnerables y en desarrollo, necesitando más de 1 billón de dólares anuales.
Comisión de Expertos en Deuda por Acción Climática:
Colombia propone establecer una mesa técnica de expertos para revisar reformas necesarias que aseguren la sostenibilidad de la deuda de los países en desarrollo.
Liderazgo en el Fondo de Pérdidas y Daños:
Como representante de América Latina y el Caribe, Colombia lideró la discusión que estructura el funcionamiento del Fondo de Pérdidas y Daños, ofreciendo recursos necesarios para enfrentar los efectos del cambio climático.
La Urgencia de un Cambio Radical:
De otra parte, la ministra Susana Muhamad destaca la urgencia de un cambio significativo, criticando los resultados negativos del Balance Mundial. Se solicita un tratado internacional para garantizar una transición económicamente racional.
Colombia llega con la voz de las comunidades y un llamado claro: la COP28 no puede ser simplemente una formalidad. Debe ser un punto de inflexión hacia la acción climática real y ambiciosa. La nación se presenta no solo con propuestas, sino con la determinación de liderar un cambio radical para salvar nuestro planeta.
Ahí está nuestro Presidente, tremendo Estadista pero según la oposición «haciendo el ridículo ante el Mundo»
Colombia no ha podido prosperar por esos nefastos fanatismos de grupos, movidos algunos, por intereses obscuros y egoístas, otros por la ignorancia absoluta, y otros, por la terrible envidia de no haber logrado liderazgo internacional como el actual presidente. Ojalá la juventud pensante, libre de influencias partidistas e impermeable a las tentaciones del poder y la corrupción, logre unirse y seguir el ejemplo de quienes siguen luchando por desarrollar el país.