Chía amanece con nuevo alcalde
En medio de una fiesta electoral, se llevo a cabo el proceso democrático, que marcará los destino de Chía por los próximos cuatro años.
El triunfo de Segura y básicamente los puestos que ocuparon el resto de candidatos una vez contabilizado su caudal electoral, no fue una sorpresa porque, guardadas las proporciones, coincidió con las tendencias anunciadas por las diferentes encuestas.
El nuevo alcalde y sus seguidores terminaron tomándose anoche el centro de la ciudad, en una caminata de alegría ante el éxito obtenido.
El Nuevo Alcalde
Luis Carlos Segura Rubiano
Partido Conservador
Nacido en Chía, es licenciado en Lengua Castellana y Literatura de la Universidad de La Sabana, tiene una especialización en gerencia educativa de la Universidad Minuto de Dios, máster en psicopedagogía de la Universidad Internacional de la Rioja. Con 34 años es casado y tiene cinco hijos.
Fue concejal de Chía a los 18 años y dos veces vicepresidente del Concejo 2004-2007, se desempeñó como secretario de Educación (2016 – 2018), durante la administración de Leonardo Donoso.
Se define como independiente con el apoyo de muchos sectores y gremios del municipio. Frente al POT, afirma que si este es suspendido definitivamente, habría que elaborar uno nuevo con la participación ciudadana.
Como alcalde aspira a planear la ciudad muy bien, con un buen equipo de trabajo, basado en las fortalezas del municipio: buen recaudo tributario, fuentes hídricas, un presupuesto de 271 mil millones, oferta turística sin explotar, entre otros y sus debilidades: las PTAR, pues en su opinión como municipio de primera categoría debería contar con tres plantas de tratamiento; el hecho de no tener una variante de doble calzada; el no poseer jardines sociales en sectores como Cerca de
Piedra, Tíquiza, Yerbabuena alta, baja…, falta de equipamiento, empoderamiento de la ciudadanía, la seguridad.
El modelo de ciudad lo proyecta realizando inversión en la gente, apropiación y arraigo por el territorio, respeto por las zonas agrológicas y crecimiento ordenado, esto lo asumiría con una deuda de 110 mil millones aproximadamente. Afirma que su reto es: demostrar poder de administración.