Parte de las propuestas que se han llevado a cabo en este 2º Segundo Festival Latinoamericano de Teatro ha sido unificar nuestros pueblos, generar sentido de pertenencia y conservar la memoria histórica reconociéndonos todos como hermanos latinoamericanos, obras de teatro como “Crónicas Anacrónicas de la Conquista” de la Corporación Quijotadas de Ecuador son solo una muestra de lo importante que es para el ser humano mantener las costumbres y tradiciones intactas, identificarlas como propias y generar a través de ellas identidad.

De la actuación a la narración

Por otra parte en entrevista con la narradora oral Maritta Carrión de Perú, ratifica la importancia por compartir y transmitir de generación en generación las historias de nuestros pueblos; debe ser entendido como un medio para transmitir saberes y experiencias que fortalezca cada día más a las comunidades. Es así como Carrión a través de su presentación de narración oral “Cuéntame Perú” entrelaza tres historias de tradición peruana, mostrándonos toda la magia y riqueza que guarda este país, tanto en su oralidad como en sus costumbres.

El medio ambiente, la gran constante del discurso teatral

Adicionalmente el Festival que se realiza en Zipaquirá, ha permitido a la comunidad disfrutar, aprender y divertirse con las diferentes puestas en escena, ejemplo de ello es la pieza teatral “Pimirs y La Isla de la Basura” de la Corporación Exosto de Madrid Cundinamarca, la cual integró a grandes y chicos entorno a la historia de dos personajes que buscaban con la complicidad del público enseñar a los niños la importancia del reciclaje y la protección al medio ambiente.

El teatro en todos los rincones de Zipaquirá

“El Festival lo hacemos todos” es la consigan más significativa de este evento y muestra de ello es que la Corporación Artística y Cultural Inconsciente Colectivo y las juntas de acción comunal de barrios como El Primero de Mayo, San Gabriel, La Esmeralda, Los Comuneros, Vereda San Jorge y Cambulos se han sumado y han creído en el arte como motor transformador de sus comunidades, buscando llegar al mayor número de lugares con presentaciones teatrales de calidad, tales como: “Triquiñuelas de la Bruja”, “La Luna y el Gato”,  “Caja de Sueños”. “El Niño Vestido de Gris”, “Yerma”, entre otras, mostrando interés por los espectadores generando en ellos distintas emociones, reflexiones sobre su   realidad social, dándole espacio a la imaginación y diversión que permiten estos espacios de sano esparcimiento, convirtiéndolos en pretexto para encuentros vecinales en torno a las artes escénicas.

Foto: Primera arriba, «Crónicas Anacrónicas de la Conquista de la Corporación», compañía Quijotadas de Ecuador
Foto: Segunda abajo, «Pimirs y La Isla de la Basura», Corporación Exosto, Madrid Cundinamarca