Alerta Amarilla en cuenca media del Río Bogotá y alerta Naranja en su cuenca baja
Como consecuencia de las fuertes precipitaciones en las últimas horas en gran parte del territorio cundinamarqués, Gobernación ordena activar los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo.
Para Chía, la CAR da parte de tranquilidad por inundaciones.
Dichas alertas generan de inmediato la necesidad de activar los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo y los protocolos para el monitoreo, alarmas locales, evacuación y demás acciones según sus planes de contingencia en la ribera del río Bogotá y afluentes.
Al día de hoy han sido reportadas dos emergencias por desbordamientos en el Municipio de Apulo en la vía que de la capital de la República comunica con el municipio de Girardot, a la altura del kilómetro 39 por el desbordamiento de la quebrada Guacaná, situación que fue controlada en pocas horas y en este momento se encuentra totalmente superada.
Otra, en el municipio de Tocaima en las veredas Morro Azul, Puvenza, Acuata y en algunos barrios céntricos del municipio. Adicional, se reporta la pérdida de la banca en la carretera que comunica a los municipios de San Francisco y Supatá a la altura de ‘La Campiña’, lo cual generó el cierre total de la vía.
Cabe anotar que las obras de adecuación hidráulica, adelantadas por la CAR Cundinamarca sobre el río Apulo, suprimieron los riesgos por inundaciones en el sector del barrio Gaitán, localidad tradicionalmente expuesta a desastres por inundaciones y desbordamientos de este afluente que vierte sus aguas al río Bogotá.
Los reportes más recientes de los niveles del río Bogotá arrojan unos resultados de caudal en las compuertas de Alicachín, al sur de la Capital, de 117 metros cúbicos por segundo (mt3/seg).
El ingeniero Aníbal Acosta Pulido, Director del fondo para las inversiones ambientales de la cuenca del río Bogotá FIAB de la CAR, recordó que “durante el período de afectación del pasado fenómeno La Niña, años 2010 – 2011, la capacidad del río Bogotá era de apenas 100 mt3/seg, lo cual sugiere que gracias a las obras de adecuación hidráulica, adelantadas por la CAR en 52 kilómetros de la cuenca media, las comunidades de Fontibón, Engativá y Suba, pueden estar tranquilos, ya que en la actualidad el río cuenta con una capacidad hidráulica de 200 mt3/seg disminuyendo ostensiblemente el riesgo por inundaciones, así mismo en los municipios de Mosquera y Funza en Cundinamarca”.
En el momento el río Bogotá está tributando al Magdalena alrededor de 150 mt3/seg.
EL CASO DEL RÍO FRÍO EN CHÍA
Respecto al municipio de Chía, el río Frío, afluente que causó graves inundaciones por desbordamiento de sus aguas en el pasado fenómeno La Niña, reporta total normalidad y aunque hay un incremento en el nivel de su caudal, este no representa ningún riesgo prominente sobre las fincas y conjuntos residenciales de la zona gracias a las obras de adecuación hidráulica que la CAR Cundinamarca adelantó también en esa fuente hídrica.
Manuel González, Director Operativo y de Infraestructura de la CAR Cundinamarca, aseguró que “la CAR cuenta con un banco de maquinaria, propiedad de la entidad, dispuesta 24 horas a la atención de las necesidades de las comunidades, recursos humanos y técnicos que se disponen con celeridad a la protección de la vida y los bienes de los ciudadanos asentados en el territorio de la jurisdicción”.
RECOMENDACIONES
La Car Cundinamarca recuerda que cualquier evento anómalo debe ser reportado a los comités de gestión del riesgo local, al 123, la Policía Nacional y alcaldías municipales.
LA CAR RECOMIENDA
Mantenerse alerta ante los comunicados de las autoridades locales de riesgo y avisar a los mismos cualquier incremento o variación inusual de los niveles de las fuentes hídricas.