Avanza cumplimiento de órdenes de restitución en Cundinamarca
Hasta el momento han sido destinados $1.073 millones para el desarrollo de proyectos productivos familiares en los municipios La Palma, San Juan de Rioseco y Yacopí, donde los beneficiarios están implementando iniciativas de desarrollo empresarial. Casi treinta reclamantes se han inscrito al curso Producción Agropecuaria, ofertado por el SENA.
“Nos interesa superar los cuellos de botella que han impedido la comunicación directa con las víctimas, generar orientación de vida a los beneficiarios para que conozcan el avance de cada orden y lograr que las instituciones informen las fechas en que se implementarán las medidas complementarias”, expresó el director territorial en Bogotá de la Unidad de Restitución de Tierras, Fabián Enrique Oyaga.
“Me siento feliz, porque me están dando la oportunidad de salir adelante con mi familia. Estoy muy contento de volver a tener mi tierra. Voy a capacitarme con el SENA. ¡Voy a aprender!”, comentó con entusiasmo un campesino de la vereda El Salitre del municipio La Palma.
De acuerdo con Oyaga, hasta el momento han sido destinados $1.073 millones para el desarrollo de proyectos productivos familiares en los municipios La Palma, San Juan de Rioseco y Yacopí, poblaciones donde los beneficiarios están implementando iniciativas de desarrollo empresarial.
Para ello el acompañamiento del SENA es fundamental, ya que con la formación que los beneficiarios adquieran se garantiza la sostenibilidad de los proyectos productivos y una ejecución de negocios con calidad. Con la jornada se logró la inscripción de veintinueve restituidos al curso Producción Agropecuaria ofertado por el SENA.
“Hemos unido esfuerzos para lograr el retorno de estas personas, desarraigadas hasta ahora por el conflicto. Hoy estamos con ellas, ofreciéndoles alternativas de desarrollo integral”, puntualizó el director regional del SENA en Cundinamarca, Gustavo Adolfo Araque.
Por su parte, el Icetex socializó las líneas de crédito educativo orientadas hacia la población víctima del conflicto armado. Además, la Defensoría del Pueblo atendió los casos de los beneficiarios con sucesiones. De la misma manera, la Fundación Espeletia, en asociación con la Gobernación de Cundinamarca, destinó recursos para coadyuvar en el proceso de estabilización de beneficiarios de restitución de tierras, priorizando proyectos productivos para doce de estas familias.
Con el apoyo a la población económicamente activa, víctima del conflicto interno, las entidades involucradas estimulan la generación y el aumento de ingresos para estas familias. El beneficio llega a partir de la utilidad del potencial humano y los terrenos que han sido restituidos, así como del aporte en capital semilla con que se abren las puertas a un nuevo comienzo para este grupo de restituidos.