Comisión de Moralización de la Contraloría analizó temas ambientales de Cundinamarca
La Gobernación de Cundinamarca, a través de la Secretaría del Ambiente, participó en la Comisión Regional de Moralización de la Contraloría de Cundinamarca.
En el caso de la laguna de Fúquene, el propósito es aportar para su mejoramiento, revisando aspectos como el de ganadería intensiva que se desarrolla en la provincia de Ubaté, la sedimentación a causa de la actividad minera en las partes altas del área de influencia del cuerpo de agua, la problemática de las aguas residuales que generan los municipios de la provincia; así como el funcionamiento financiero de las Planta de Tratamientos de Aguas Residuales (PTAR).
“Revisamos en qué va el proyecto que lidera la Corporación de Fúquene ‘Todos de Corazón’, en la que el departamento hace un esfuerzo por viabilizar vía regalías $20.000 millones que se suman a los $180.000 millones que aportará esta Corporación vía empréstito, para recuperar la capacidad hidráulica del ecosistema lagunar”, señaló Eduardo Contreras Ramírez, secretario del Ambiente de Cundinamarca.
En el caso de la minería ilegal, se resaltó la importancia de ejercer la minería en el departamento pero de forma legal y cumpliendo con todos los requisitos legales y ambientalmente requeridos para garantizar el menor efecto negativo sobre el ambiente, para lo cual es necesario implementar los planes de manejo ambiental y los planes operativos de trabajo que requiere la autoridad minera.
Finalmente, la Comisión analizó la expedición de la licencia ambiental por parte de la Autoridad de Licencias Ambientales (ANLA) para un nuevo punto de disposición de residuos sólidos en el municipio de Bojacá, donde se dio vía libre al relleno sanitario Parque Ecológico Praderas del Antelio, en contravía de los que ya había pronunciado la Corporación Autónoma Regional (CAR).
“Hemos sido enfáticos en acompañar al municipio, pero también hacemos un llamado de atención a la organización territorial de Bojacá, donde hay un suelo disponible para esta actividad y se hace necesario revisarlo para que estas actividades se concentren en un polígono como en el caso del relleno sanitario Nuevo Mondoñedo”, enfatizó el titular da la cartera ambiental.
La Gobernación de Cundinamarca ofreció el acompañamiento técnico necesario para que Bojacá tomara las acciones de carácter jurídico tendientes a frenar este proceso y también se le dejo claro a la Administración Municipal que a pesar de que la actividad de disposición final de residuos sólidos está en manos de un mercado competitivo, también la empresa prestadora del servicio público debe cumplir con la normatividad local y todos los permisos correspondientes.