Fernando Sánchez Gutiérrez: “Si lo decimos, lo hacemos”
Exalcalde de Chía se presenta por tercera vez a la contienda electoral en la idea de llegar por segunda vez a la alcaldía. Su administración de 2004 a 2007 fue ampliamente cuestionada por temas como la Universidad de Pamplona, la biblioteca y el auditorio municipal y Circulemos, entre otros.
Es tecnólogo en Administración de Empresas y acaba de graduarse como Abogado de la Corporación Universitaria de Colombia, Ideas. Lleva 25 años de servicios en el sector público, 18 de ellos como funcionario de la empresa municipal de servicios públicos.
Su currículo laboral es diverso, fungió como asesor de Nancy Patricia Gutiérrez, expresidenta del Senado; fue miembro de la UTL del ingeniero José Edilberto Caicedo Sastoque, representante de la Cámara por Cundinamarca y, durante los últimos cuatro años, hizo las veces de asesor en algunos municipios para el Plan de Ordenamiento Territorial (POT).
De su anterior gobierno se ufana de haber iniciado el sistema de 123 de emergencia; de haber construido la vía de Los Chilacos, de haber iniciado la Biblioteca Municipal; de haber logrado la gratuidad en la educación en los colegios públicos y de haber arrancado el programa Chía Gastronómica.
Ahora, con el conocimiento y la experiencia a cuestas, busca nuevamente llegar al primer puesto de la administración municipal para echar a andar otros proyectos ambiciosos que beneficien a la comunidad. Aquí, algunas de sus propuestas.
¿Cuáles son los cinco problemas de fondo que tiene el municipio?
FSG: “Chía tiene más de cinco problemas; pero si hay que priorizar, es necesario empezar, entonces por la seguridad (falta de presencia de la policía, de apoyo tecnológico y de oportunidades para los habitantes), pero principalmente atacar el microtráfico, que cada vez se hace más fuerte por falta de oportunidades, especialmente entre los jóvenes. Lo cierto es que de los 1.050 estudiantes terminan su bachillerato, solo 300 pueden continuar sus estudios universitarios.
También está la movilidad, que amerita que saquemos el tráfico pesado de la Avenida Pradilla. El tema ambiental, de igual forma, es una prioridad, en el que se incluye la construcción de la planta de tratamiento, la separación de alcantarillado, la repotenciación de las tuberías de acueducto (la presión empieza a bajar). Así como también la falta de empleo, el acceso a la educación superior, la carencia de escenarios deportivos y culturales; la salud.
Pero el problema más grave es el POT que ha permitido que Chía crezca sin control. Es un municipio sin un verdadero ordenamiento. Es la primera medida que hay que adoptar”.
¿Qué hará en su Gobierno para darles solución a los problemas que ha enunciado?
FSG: “Seguridad: hay que fortalecer el trabajo de inteligencia y el pie de fuerza. Haremos la expropiación de los inmuebles que se usen para cometer delitos, como el microtráfico. Se construirán subestaciones de policías en algunas veredas del municipio, como: Bojacá, Fagua y Cerca de Piedra.
Así mismo, instalaremos más cámaras de seguridad y se le hará mantenimiento a las que existen, especialmente a las entradas de los colegios para atacar a los delincuentes que van a vender drogas. También se hará control a los sitios en donde se comercializa alcohol a los menores de edad y se hará revisión a los establecimientos públicos y comerciales, para evitar este problema.
De igual forma, me encargaré de hacer convenios con las empresas de taxis para que ayuden a combatir el delito; fortaleceremos el manejo y operación del sistema 123, que queremos que vuelva a ser manejado por la Alcaldía, para darle mayor atención.
Y me parece importante dotar con radios de comunicación a los presidentes de las juntas comunales, para que haya una conectividad directa con la policía.
Medio ambiente y sostenibilidad:
“Queremos un municipio ambientalmente sostenible. Hoy, la administración actual está diseñando el plan maestro de acueducto y buscamos apoyarlo para convertirlo en una realidad. Pero la idea es que se construya con alcantarillado separado, que ahora es mixto; para esto, es necesario conseguir los recursos, con el fin de desarrollar por etapas todos los proyectos.
Las plantas de tratamiento también son indispensables. La Ptar, que antes era una laguna de oxidación y que estaba en manos de la CAR, actualmente es administrada por el municipio, y eso nos da vía libre para empezarle a inyectar los recursos necesarios. Ya está el presupuesto, de un leasing hecho por el actual gobierno; pero ahora el dilema es qué empresa la va a construir. En mi Gobierno le daremos la dirección a este proceso, que tanto necesita el municipio.
Sin embargo, Chía requiere de cuatro plantas más, dos en el río Bogotá y dos en el río Frío. Aun así, el POT mostrará cuántas realmente se necesitan y, depende del suelo, en qué sitios deben quedar.
En cuanto a las minerías, haremos seguimiento, a través de la Secretaria de Medio Ambiente, para evitar la deforestación y la explotación ambiental fuera de las normas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la CAR es quien ha dado estas concesiones. Nosotros solo nos encargaremos de hacer las visitas respectivas.
Movilidad
“Para darle una solución determinante a la movilidad en Chía, no hay que ampliar la Avenida Pradilla; debemos tocar el tema de fondo. Debemos estudiar la creación de otras vías, que logren articular la ciudad.
Por ejemplo, para evitar que el tráfico pesado llegue a la Pradilla, es indispensable construir la Troncal del Peaje, una vía que comunique la variante en línea recta hasta la Autopista Norte. Presentaremos el proyecto, buscaremos la financiación y aportaremos los recursos y la construiremos.
Otra vía urgente es la Troncal de Caldaica, que va desde el centro de la ciudad -bajando por el barrio 20 de julio hasta la variante- hasta llegar a Teletón. Allí no hay una sola construcción, lo que facilitaría el proceso.
También hay que construir la Vía de Puente Peralta, desde la carrera novena hasta la Autopista (saliendo frente al centro comercial Fontanar) que en sus 1,5 kilómetros de distancia no tiene viviendas construidas y se puede ampliar. Esta calle llevaría a la gente que va hacia Bogotá, directamente.
Otra vía fundamental para descongestionar la parte norte es la que viene de MG – Puente Peralta- hasta la carrera 9ª, que es sumamente angosta y con vallados pero hay que ampliarla. La otra que hay que extender es la que está en la iglesia de Bojacá, entre la carrera 9ª y la vía que va a Dulcinea; aquí se debe canalizar el vallado y mover los postes de la energía, para permitir la movilidad.
A la vez, queremos un parque ecológico entre la iglesia de la Valvanera y la Cueva del Mohán, que también ayudará a la parte turística.
Por otro lado, el próximo año, cuando llegue a su fin la concesión Devinorte, seguiremos en la lucha de conseguir la tarifa diferencial enel peaje para los habitantes de Chía, inclusive, buscaremos el respaldo de la Gobernación para este fin. Es increíble que en mi anterior gobierno había dejado casi listo ese proceso, pero no se le dio continuidad.
Así mismo, les pediremos a las empresas de taxis la instalación obligatoria de taxímetros, pues se ha convertido en un problema el valor de las carreras; ampliaremos el horario del transporte público a las veredas, especialmente para los estudiantes que llegan a altas horas de la noche de sus universidades.
A los estudiantes, tanto los que van a Bogotá como los que vienen a Chía a sus planteles educativos en transporte público, les conseguiremos la tarifa subsidiada, a través de un convenio con las empresas de transporte.
Finalmente, impulsaremos la construcción de parqueaderos y zonas azules en Chía. El primer consejo que haré en mi Gobierno es con los comerciantes de la zona histórica, con el objetivo de darle orden a los ambulantes y quitar todo lo que afecte la movilidad.
Para concluir, quiero ser claro. En caso de renacer la Troncal del Cerro, no apoyaré su construcción. Esta iniciativa buscó modificar el Plan Vial del municipio y poner en aprietos la parte medio ambiental y a muchas comunidades.
Así mismo, me encargaré de ver cómo podemos eliminar el peaje de Fusca, que ataca la calidad de vida de los residentes, quienes deben pagar peaje cada vez que necesitan ir a hacer cualquier vuelta a Chía.
Educación
FSG: “En este punto concentraremos nuestra mayor atención. Queremos ofrecer una alimentación preparada en los colegios, que cumpla con los requisitos de salubridad, a todos los estudiantes, sin importar el grado. También haremos una gran inversión en infraestructura de colegios; en la construcción de parques alrededor de los planteles; fortaleceremos el bilingüismo, al igual que los programas de innovación y de tecnología. Diseñaremos la formulación y la construcción de plan educativo municipal; capacitaremos a los docentes de Chía.
Ampliaremos los convenios con los entes educativos, para otorgar préstamos a los padres de familia; apoyaremos al Sena (que pasará a tener siete mil cupos) y la terminación de la Universidad de Cundinamarca, a la cual dotaremos con tecnología y buscaremos ampliar las carreras profesionales, según las necesidades empresariales de la zona. Sin embargo, la idea es que haya otra universidad en el municipio y que podamos establecer convenios con las universidades privadas, para el acceso a la educación superior de los jóvenes”.
Salud
“FDG: “La idea es promover la llegada de otras clínicas, como la Marly. En el hospital de Chía, buscaremos el apoyo del gobernador para remodelarlo y convertirlo de segundo nivel, con un cuerpo de médicos especialistas, sala de cirugías, de urgencias y de maternidad. Mejorar la calidad en el servicio y acabar con las largas colas. La idea es volverlo eficiente y que garantice el derecho a la salud”.
¿Qué opina de los ajustes que se la hacen actualmente al POT?
FSG: “Hay falta de planeación e improvisación en este gobierno. Es de obligatorio cumplimiento que el POT quede suscrito en esta vigencia. No sé cuáles son los intereses que lo mueven hoy, pero cada vez se hacen más modificaciones. Realmente no conozco profundamente lo que están haciendo. Solo lo socializaron una vez hace unos años, pero luego se olvidaron de eso.
Cuando llegue a la Alcaldía haré una revisión total de los ajustes, para saber si todo está en orden; a la vez, hay que tener en cuenta si se permite el crecimiento de la parte rural y verde, para evitar que ésta se pierda en el municipio.
También hay que buscar solucionar el problema de los raizales, que no pueden dividir sus parcelas -para heredárselas a sus hijos- pero, en cambio sí les conceden a los constructores clasificar un terreno como quieran, para construir.
Hay que tener en cuenta el medio ambiente en el POT y buscar que se respete el uso del suelo; y el tipo de desarrollo que se le puede dar al corredor vial de la Autopista Norte, que puede ser importante muy para Chía”.
¿Qué hará con el problema de las avícolas?
FSG: “Es un problema de salud, de convivencia y de calidad de vida, que también afecta el entorno. Hay que mirar qué ha permitido ese desorden, y la respuesta está en el POT.
Tengo la intención de sacar esa avícola (dar el nombre) de ahí, que ya no cumple con el uso del suelo, porque ya se convirtió en residencial. En mi primer año de gobierno, esas avícolas se van de esos puntos”.
¿Cuál será su política en materia de integración regional?
FSG: “Desarrollaré un gobierno incluyente de diálogo y concertación. Debemos planear y concertar el desarrollo conjunto de la Sabana. Por ejemplo, no puede ser que Bogotá tome el agua de nuestros municipios y que nos cobre luego este recurso a precios altos. Esa falta de articulación y de comunicación tiene en problemas la movilidad, el medio ambiente, la conurbación, el desarrollo y la seguridad de toda la región. Obviamente este tema será uno de los pilares de mi alcaldía”.
¿Cuál es su planteamiento respecto a la construcción de paz y seguridad, teniendo en cuenta que sería un alcalde del posconflicto nacional?
FSG: “Es un poco aventurado hablar de ésto, porque vemos que el Gobierno no tiene todavía una política clara. No existe una presentación formal de lo que se pretende firmar en La Habana. Puedo hablar de lo que existe hoy, y es volver a Chía un punto de oportunidades y de inclusión social”.
¿Cuál será su política de Vivienda de Interés Social?
FSG: “Tengo tres estrategias: en el nuevo POT hay que tener en cuenta que los raizales puedan dividir sus lotes y tengan la opción de recibir subsidios para la construcción en sitio propio. En cuanto a las Organizaciones Populares de Vivienda, vamos a vigilarlas, porque no cumplen con la parte legal; especialmente cometen injusticias con aquellas personas que entregan sus dineros ahorrados para acceder a una vivienda, y nunca la reciben o la reciben sin servicios y calidad. Vamos a controlar esto.
Actualmente en Chía hay unas ocho mil personas que no tiene vivienda. Buscaremos los terrenos para poder construir Vivienda de Interés Social, que beneficie solo a las personas que vivan en el municipio de Chía, sin vivienda propia; vamos a acabar con los favoritismos.
La vivienda prioritaria no la apoyaré, porque la idea es primero favorecer a la gente que viven aquí”.
¿Qué gobernante será usted para Chía? ¿Al 2019, qué huella le gustaría dejar?
FSG: “Tendré una administración de puertas abiertas, con participación ciudadana. Que los habitantes sientan que son importantes y que sus sugerencias e inquietudes son atendidas.
Quiero tener una activa participación de los jóvenes, por eso crearé la Secretaria de Juventudes. Esta será una administración que trabajará para que los habitantes puedan volver a confiar en sus autoridades. Que lo dije, y lo hice, como dice el eslogan de mi campaña”.