Padres piden prudencia ante la implementación de la campaña «Al Colegio en Bici»
Un llamado a la prudencia y a la precaución le hacen a la administración municipal, los padres de familia que ven con preocupación la implementación de la campaña «Al Colegio en Bici», sin que existan ciclovías adecuadas.
Este miércoles 600 estudiantes, un grupo de profesores y algunos padres de familia de la institución educativa Fagua, salieron en bicicleta a primeras horas de la mañana a recorrer la vereda en lo que se denomino un ciclo-paseo, para consolidar una campaña que la secretaria de Educación quiere implementar bajo el nombre de ‘Al Colegio en Bici’.
La estrategia incluyó -además de la travesía en bicicleta- la promesa de entrega, en una siguiente fase, de dotación, supuestamente para los estudiantes ciclistas, sobre el kit no se dio a conocer que incluye ni si el equipo es para los ciclistas o la bicicleta. En el recorrido también se buscaba establecer unas rutas seguras que garanticen el desplazamiento sin peligro de los estudiantes que van o vienen del colegio en ‘bici’, todo lo cual hace parte del Plan Estratégico Vial Escolar.
Sin embargo frente a este programa hay padres que ya han reaccionado con preocupación, toda vez que consideran que la única manera de garantizar la seguridad de los jóvenes estudiantes es mediante ciclovías amplias y bien hechas, lo que según afirman no existe en su totalidad a lo largo de la ruta escolar. Al respecto señalaron el caso de la ciclovía de Guaymaral, «la cual se inicio hace varios meses y aun no la terminan como es debido y eso que su destino final es un colegio», puntualizó uno de los padres.
Para ellos la iniciativa podría llegar a ser muy buena si existiera en la ciudad la red de ciclovías necesarias para llegar a los a los colegios desde diferentes puntos estratégicos del municipio, pero esa red no existe, de otra parte aseguran que los jóvenes son jóvenes y que antes de que se sucedan hechos que lamentar, la administración debería ponerse en la tarea de hacer estas ciclovías de una manera técnica y rápida y después entrar a implementar este programa.
En este sentido aseguran que el gobierno municipal debe tener prudencia, pues una cosa es salir por las veredas con los secretarios de Movilidad y Educación, agentes de transito y un numeroso grupo de niños, frenando los carros, porque de por si las calles de la ciudad y de las veredas son bien estrechas, y otra muy distinta es salir todos los días por esas vías sin ciclorrutas, a someter a los jóvenes a que tengan que pelearse el espacio en la vía con los carros, buses y buceas que circula por ahí, o jugarse la vida ante la impudencia de cualquier conductor.
