El primer de mayo, un día más para trabajar
En 1886 trabajadores de una fábrica de Chicago, Estados Unidos, iniciaron una gigantesca huelga con el fin de que se instaurará una jornada laboral de ocho horas.
highlight] Chía | Redacción EPDC, Por Tania Pacheco | Día del trabajo |[/highlight] El Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional (París,1889) institucionaliza “El día del Trabajo” en homenaje a los Mártires de Chicago y como jornada reivindicativa de los derechos de los trabajadores. En 1955, el Papa Pío XII estableció el 1° de Mayo como Día de San José, en reafirmación implícita de la conmemoración.
Los vendedores de la Plazoleta el Cacique
Sandra Lucía Chacón Bajearano, comerciante de la Carpa El Cacique. Foto:Tania Pacheco
En la actualidad, mientras muchos lo conmemoran este día, otros siguen reivindicando sus derechos en manifestaciones y muchos no paran de trabajar ni de noche ni de día, en especial esa gran población de vendedores ambulantes que se mueven por todo el país y por supuesto en nuestro municipio.
Sandra Lucía Chacón Bejarano, ha sido vendedora ambulante toda una vida, se especializó en la venta de controles para equipos de sonido y así, logró darles carrera universitaria a sus tres hijos, sin olvidar que la mayor, Ivonne Alejandra es patinadora profesional de nuestro municipio.
Pero ante todo, Chacón se reconoce como reivindicadora de su gremio, de esta forma, en la actualidad es una de las representantes de los treinta y cinco vendedores que aceptaron ser reubicados por la alcaldía en la “Plazoleta El Cacique”, más exactamente se trata de una inmensa carpa verde ubicada en el mismo predio de la plaza de mercado.
De acuerdo con Chacón, en este espacio van a cumplir 10 años y aunque no desconocen que se benefician de varias maneras, pues no pagan un arriendo, están a salvo del sol y de la lluvia, y la policía no los acosa … cuando se movían por las calles del municipio ganaban el suficiente dinero para pagar el arriendo, los servicios y el estudio de los hijos; desafortunadamente en la Plazoleta pasan días sin vender absolutamente nada, al punto que en ocasiones hacen colectas entre todos para poder comprar lo del almuerzo.
En su opinión esta situación se presenta por varias circunstancias: primero por falta de publicidad, después de varias reuniones y solicitudes, Chacón expresa que la administración parece que les va a autorizar una valla.
Carpa El Cacique, Foto, Estrategia Medios.
Por otra parte, la Plazoleta está ubicada en un sitio concurrido por personas viciosas y delincuentes, además hay vendedores ambulantes que se ubican en los alrededores lo cual les resta la posibilidad de vender a los treinta y cinco puestos, y finalmente en la Plazoleta también se reubicaron los aproximadamente diez vendedores del Batán quienes antiguamente laboraban en el segundo piso de la plaza de mercado, ellos pagan un arriendo, y abren el negocio solamente los fines de semana, por esta razón durante los cinco días restantes la Plazoleta luce como un espacio sin mayor oferta, por no mencionar la escasa iluminación.
De acuerdo con la representante, estas 35 familias poseedoras de los puestos de trabajo han hecho las cosas bien, es decir, decidieron reducirse para no invadir el espacio público, se rigen por un reglamento y trabajan honradamente de domingo a domingo; en su opinión este comportamiento los faculta para recibir un apoyo más contundente por parte de la administración, de acuerdo con Chacón, el alcalde Donoso, hace un año les prometió que en la factura de los servicios públicos se le iba a hacer publicidad al lugar y hasta el momento no ha sucedido nada, pues tampoco se les apoya con la problemática social del sector.
Sandra, cree en lo que hace, defiende el trabajo de las familias que al igual que ella, se ganan la vida honradamente, en este orden de ideas, solo reclama un poco más de apoyo para que muchos de los vendedores que se acogen a la propuesta de la alcaldía no se vean obligados a salir nuevamente a vender a la calle.
